Tu carrito
No hay más artículos en su carrito
- -5%
Combinaciones Gourmet: Trufa y Boletus
Existen ciertos productos que pueden mejorar un plato con solo su presencia, los restaurantes gourmet lo saben bien y fusionan estos ingredientes en sus elaboraciones para conseguir un sabor increíble en sus recetas. Muchas veces son los responsables de que tus papilas gustativas se despierten y tengas esa sensación de "qué rico" cuando das un bocado.
Hoy vamos a contarte su secreto, entre ellos, la trufa y el boletus son de los más utilizados. Estos productos, considerados joyas de la cocina gourmet, aportan sabores muy intensos y fácilmente reconocibles.
¿Cuáles son los trucos para utilizar bien estos productos e incluso combinarlos en un solo plato de la mejor forma? Te lo contamos a continuación.
La trufa negra
Primero hablemos de la trufa negra, el ingrediente que más se utiliza cuando se quiere un resultado gourmet en un plato.
La trufa, conocida como el "diamante negro" de la cocina, es un hongo subterráneo que crece en simbiosis con las raíces de ciertos árboles como robles, encinas y avellanos. Existen diferentes tipos, pero las más apreciadas son la trufa negra (Tuber melanosporum) y la trufa blanca (Tuber aestivium). Estas últimas son menos apreciadas en la cocina gourmet ya que tienen un sabor menos intenso.
Su aroma único: intenso, terroso y ligeramente almizclado, con la capacidad de impregnar cualquier plato. Este perfume es tan apreciado que la trufa se ha convertido en uno de los ingredientes más caros del mundo.
Recolección y Exclusividad
La trufa no se puede cultivar fácilmente, lo que la convierte en un producto escaso. Su recolección, es todo un ritual que involucra a perros entrenados (y en algunos casos cerdos) para localizar estos preciados hongos bajo tierra y extraerlos de la mejor forma.
El tiempo de recolección es limitado, ya que depende de la temporada de crecimiento. Esto, sumado a su complejo proceso de búsqueda, explica el alto precio que alcanza en los mercados internacionales.
Cómo Disfrutarla
La trufa es increíblemente versátil y se utiliza con moderación debido a su potente aroma. Algunos de los platos más populares son:
- Huevos trufados: Un clásico que resalta el sabor de la trufa al máximo.
- Pasta con trufa: Una preparación sencilla, donde la trufa rallada aporta sofisticación.
- Aceite de trufa: Ideal para aderezar ensaladas, pizzas o risottos.
¿Cómo se utiliza en un restaurante gourmet?
Si quieres que tu plato pase de un 5 a un 10 de calificación te recomendamos rallar un poco de trufa fresca por encima al finalizar y justo antes de comer, no es necesaria mucha cantidad ya que este alimento tiene un sabor y aroma muy potentes.
Así conseguirás que tu plato tenga un punto sofisticado, también puedes trufar los ingredientes antes de utilizarlos como, los huevos antes de hacer una mayonesa, por ejemplo, su cáscara porosa permitirá que, al meterlos en un bote con una trufa, se impregnen del aroma antes de utilizarlos.
Boletus: El Rey de los Hongos
El boletus, también conocido como porcini en italiano o ceps en francés, es el hongo de gran prestigio en la cocina gourmet. Su textura carnosa y sabor a nuez lo convierten en un ingrediente muy codiciado. Entre sus variedades, el Boletus edulis es el más conocido y apreciado.
Los boletus son reconocibles por su sombrero marrón y su tallo grueso y blanco. A diferencia de la trufa, crecen sobre el suelo en bosques templados y húmedos, lo que facilita su recolección en comparación con los hongos subterráneos.
Sabor y Versatilidad
El sabor del boletus es complejo, con matices terrosos, dulces y ligeramente ahumados. Su versatilidad permite que se utilice tanto fresco como seco. La versión seca, al ser hidratada, intensifica su sabor y se convierte en un ingrediente imprescindible en caldos y salsas.
Algunas de las recetas más destacadas con boletus pueden ser:
- Risotto de boletus: Un plato cremoso que resalta la riqueza del hongo.
- Sopas y cremas: Perfectas para los días fríos, donde el boletus aporta profundidad.
- Salteados: Acompañan a la perfección carnes, pescados o incluso pastas.
un punto extra: el boletus deshidratado
El boletus deshidratado es el boletus que ha sido sometido a un proceso para eliminar su contenido de agua. Al hacerlo, se intensifica su sabor, su textura y sus propiedades nutritivas, pero en una forma mucho más ligera y con una vida útil considerablemente más larga.
El proceso de deshidratación se puede realizar de varias maneras, siendo las más comunes el secado al sol en verano, el uso de deshidratadores eléctricos o el secado en horno a baja temperatura. Te recomendamos tener paciencia si te decides por deshidratarlo tú mismo, ya que lleva a cabo varias horas o días.
Este proceso tiene varias ventajas, pero la principal es la concentración de sabor. Al eliminar el agua, el sabor del boletus se intensifica, lo que lo convierte en un ingrediente ideal para dar profundidad y umami a una variedad de platos.
una pareja perfecta
Aunque la trufa y el boletus son excepcionales por separado, juntos crean un combo de sabores que es difícil de igualar. En platos como un risotto de boletus con ralladura de trufa, ambos ingredientes se complementan, consiguiendo una experiencia gastronómica increíble.
Su combinación no solo destaca por su sabor, sino también por su capacidad de transformar platos aparentemente simples en creaciones de alta cocina. La clave está en utilizarlos con equilibrio para que cada uno pueda brillar.
¿Qué te han parecido estos secretos de restaurante gourmet? ¿Quieres intentarlos en casa?
