Seguro que nunca has pensado en tomar miel antes de tus entrenamientos, pero lo cierto es que resulta muy beneficiosa como pre-entrenamiento por su aporte energético.
Es una fuente natural de energía rápida y sostenida, gracias a su composición rica en azúcares simples como la glucosa y la fructosa.
Estos azúcares son metabolizados fácilmente por el cuerpo, proporcionando un impulso energético inmediato, lo que la convierte en una excelente opción para atletas o cualquier persona que necesite un "chute" rápido de energía durante el día.
A diferencia del azúcar refinado, la miel ofrece una liberación de energía más equilibrada, ya que la glucosa se absorbe rápidamente, brindando energía inmediata, mientras que la fructosa se absorbe más lentamente, proporcionando una fuente de energía prolongada y constante.
Además, la miel contiene pequeñas cantidades de vitaminas, minerales y antioxidantes que contribuyen al metabolismo energético, mejorando el rendimiento físico y la resistencia. Esto la convierte en un suplemento nutritivo para apoyar actividades físicas intensas y mejorar la recuperación tras el ejercicio.