Hacer un risotto con salsa de trufa es una excelente idea para disfrutar de un plato elegante y delicioso. Aquí tienes una receta simple para preparar un Risotto con Salsa de Trufa:
Ingredientes:
- 1 taza de arroz Arborio o Carnaroli (arroz para risotto)
- 1/2 taza de vino blanco seco
- 4 tazas de caldo de pollo o caldo de verduras caliente
- 2 cucharadas de mantequilla
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 1/2 cebolla picada finamente
- 2 dientes de ajo picados
- 1/2 taza de salsa de trufa preparada
- 1/4 de taza de queso parmesano rallado
- Sal y pimienta negra al gusto
- Perejil fresco picado (opcional, para decorar)
Instrucciones:
Calienta el caldo: En una cacerola grande, calienta el caldo de pollo o caldo de verduras a fuego medio. Mantén el caldo caliente mientras preparas el risotto.
Saltea la cebolla y el ajo: En una sartén grande, calienta el aceite de oliva y 1 cucharada de mantequilla a fuego medio. Agrega la cebolla picada y el ajo picado y saltea hasta que estén tiernos y transparentes, aproximadamente 3-4 minutos.
Añade el arroz y el vino: Agrega el arroz Arborio o Carnaroli a la sartén con la cebolla y el ajo, y revuelve durante 1-2 minutos hasta que los granos de arroz estén ligeramente tostados. Luego, vierte el vino blanco y cocina, revolviendo constantemente, hasta que el vino se absorba en el arroz.
Cocina el risotto: Comienza a agregar el caldo caliente, una cucharón a la vez, al arroz. Cocina a fuego medio-bajo y remueve constantemente. A medida que el caldo se absorbe, agrega más caldo y continúa cocinando y removiendo durante unos 18-20 minutos, hasta que el arroz esté tierno y tenga una textura cremosa.
Añade la salsa de trufa: Cuando el risotto esté casi listo, agrega la salsa de trufa preparada y mezcla bien. La salsa de trufa le dará un sabor y aroma intensos al risotto. Si lo prefieres, puedes ajustar la cantidad de salsa de trufa según tu gusto.
Incorpora el queso y la mantequilla: Retira la sartén del fuego y mezcla el queso parmesano rallado y la cucharada restante de mantequilla en el risotto. Continúa mezclando hasta que el queso se derrita y el risotto esté bien cremoso.
Sazona y sirve: Sazona el risotto con sal y pimienta al gusto. Sirve caliente en platos individuales, y si lo deseas, espolvorea perejil fresco picado por encima para darle un toque de color y frescura.
¡Disfruta de este exquisito risotto con salsa de trufa! Es un plato impresionante que seguro dejará una impresión duradera.